Y digo tóxico porque todos alguna vez nos hemos visto inmiscuidos en una relación amorosa que más que bien te genera daño pero al mismo tiempo tienes esa necesidad de estar con la otra persona porque simplemente te complementa, no importa si te está dando veneno. Pues eso es uno de los muchos temas que toca el hermoso filme de Paul Thomas Anderson El Hilo Fantasma, que nos cuenta la historia de Reynolds Woodcock, un renombrado diseñador de modas que encuentra en una mesera su próxima musa. Aquí está lo cool, lo meh y lo gacho de El Hilo Fantasma.
Lo cool
Daniel Day-Lewis
Tan solo pensar que esta es su última película se me hace un nudo en la garganta. Aquí interpreta de manera magistral a un atormentado modisto que durante todo el filme nunca sientes empatía por él pero como si se tratase de un exquisito pavorreal no puedes dejar de verlo, cada movimiento, cada ademan que hace es un logro . Es un gran punto final para una de las carreras más prolíficas de la industria.
La dirección
Sorpresiva pero meritoriamente Paul Thomas Anderson se hizo de una nominación al Premio de la Academia a Mejor Director, ya que toda la película es una obra de arte. Cada cuadro es una pintura que te gustaría colgar en la sala de tu casa y en el caso de las secuencias con movimiento parece una hermosa danza coreografiada. La dirección de actores es sobresaliente, pocos logran decir muchísimas cosas con silencios y solo con miradas. Muchísimo oficio y técnica hay en este trabajo.
La música
La historia está situada en la Inglaterra de los 50, el periodo de la posguerra. El camino fácil hubiera sido poner música propia del periodo (jazz, big band, etc…), pero no, el también nominado al Oscar, Jonny Greenwood hace otra sublime colaboración con Anderson y nos entrega un score protagonizado por el piano que parece salido del alma y lo que están sintiendo cada uno de los personajes. ¡Bravo! Una lástima que no se llevará la estatuilla, ese reconocimiento es para Alexandre Desplat y su forma del agua…
El vestuario
Una historia que tiene como marco la industria de la alta costura debía de tener un vestuario de ensueño (sí, también está nominada en esta categoría). Mark Bridges diseña con tal delicadeza las prendas de cada personaje que parecen que tienen vida propia y reflejan, como la música, el sentir de cada uno de ellos. Además de que la pasarela de vestidos que vemos es para tener la quijada en el suelo.
Lo Meh
La duración
Tal vez lo menos meritorio del filme sea la duración (la verdad si llega a cansar). Pero analizándolo bien, quizá eso era lo que quería que sintiéramos el director: el mismo hartazgo y desesperación pero a la vez fascinación que en toda la película demuestra Woodcock.
Lo gacho
El reconocimiento
En otra época El Hilo Fantasma se hubiera llevado todas las palmas, pero hoy donde lo importante, y con toda razón, es hacer gritos de denuncia y aplaudir a las minorías, la historia pasional de tres almas complejas y su convivencia alrededor del negocio high couture palidece con otras propuestas de este año.
En conclusión, no es una película fácil de digerir, saldrás del cine preguntándote qué es lo que acabas de ver (a mí me pasó), pero está tan bellamente hecha que cada cuadro vale el precio de entrada (en especial esa escena del omelette de hongos ¡Dios, ESA escena!
¿Tú ya la viste? Cuéntame que te pareció